Claro que la forma de comunicar, según mi punto de vista, lo que es el triatlón, puede que haga animarse a cualquiera, ya que lo veo como un mundo precioso, y puede que sí, que tenga engañado a más de uno.
El triatlón es un deporte bastante sacrificado, en el que tienes que echar muchas horas de entrenamiento y en el que tienes que vivir pendiente de lo que vayas a entrenar. No todo el mundo está dispuesto a despertarse un domingo a las 7.30 de la mañana para irse a hacer 80 km en bicicleta en invierno. También es difícil llegar del trabajo a las 2 de la tarde y en vez de comer y echarte un rato para descansar, coger e irte a correr hora y media, para llegar y comer sólo con la comida fría e irte rápidamente de nuevo a trabajar.
O personalmente, lo que se ha convertido una rutina en mi vida, terminar de entrenar a las 22.30 de la noche casi todos los días, ya que no tengo otras horas posibles de entrenamiento.
Pero claro, ¿qué es lo que hace que siga yendo cada día y que no abandone esta vida tan dura de seguir?...pues lo que hace posible todo esto son los objetivos. Y mientras más grande sea, con mayor ganas llegas a cada día de entrenamiento.
En mi caso el objetivo es el Trisur. Realmente es un paso muy grande. El pasar de un Sprint a un medio Ironman en un año.
Muchos de mis compañeros del Club Camaleón se impresionan, ya que es raro ver a un chaval de 23 años haciendo un medio ironman y siguiendo la pauta de entrenamientos casi a rajatabla. Muchos me han dicho que con mi edad mejor estar por ahí saliendo de copitas, con las chavalitas y demás y vivir despreocupadamente, pero sinceramente, me gusta más esto que lo otro, aunque puede que haya muchos días que lo último que quiera es entrenar, pero cuando ese día voy y cumplo con mis entrenamientos, y llego a mi casa sin poder moverme, ese día con el objetivo cumplido, estoy feliz ya que me veo más cerca de conseguir mi objetivos..TRISUR SEVILLA...18 DÍAS Y AHÍ ESTOYY!
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